¿A QUIÉN SIRVE EL CONOCIMIENTO?
Por: Ignacio Farfán
D
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ando lectura a
las diferentes temáticas sobre la educación para el siglo XXI me llama la
atención el tema de conocimiento y desarrollo social, precisamente porque se
viene a la mente la idea inmediata de que a mayor conocimiento mayor
desarrollo; sin embargo al analizar nuestra realidad nacional, al analizar
nuestras realidades grupales, nuestras realidades de convivencia social, se ve que
aquellos que son líderes y se precian de tener más o mejores conocimientos
actúan con una marcada tendencia a un profundo individualismo con el cual satisfacen
sus necesidades; pero estas necesidades no son, hablando en sentido ético de la
antigua Grecia, NO SON NATURALES, NI NECESARIAS; por eso surge la pregunta
¿para qué utilizan el conocimiento aquellos que dicen poseerlo?.
Éstos lo utilizan para ponerlo al servicio de
la satisfacción egoísta y en la defensa de intereses de grandes empresas o instituciones
que como filosofía pública tienen lemas muy llamativos como: “podemos servirte
mejor” “para la comodidad de tu vida” u otras, pero en secreto su único fin es
la coerción de la libertad de pensamiento y la creación de pseudo necesidades para
garantizarse su propia existencia.
Actuando de esta
manera no son instituciones que surjan con el propósito de servir; si no, de servirse
de los otros; para poder ocupar los conocimientos con el objetivo de cumplir sus propósitos, estas instituciones
indudablemente tienen que conocer estudios sobre sociología, psicología social
e incluso psicología de la publicidad.
Por una parte “los
estudios sobre el conocimiento social tratan de entender y explicar el
conocimiento de uno mismo, de los demás, y del mundo”.[1] En
ese sentido puede verse la importancia que existe de la comprensión del
desarrollo del individuo en sociedad, la relación que hay consigo mismo y la relación del individuo con
su entorno.
Muy raro en la
vida es encontrar a alguien que utilice el conocimiento para liberar, pero esa
liberación es de tipo psicológico en donde las personas puedan crear su propio
mundo, tener sus propios ideales,
descubrir sus virtudes y si esto fuera
así también ellos serían reproductores del mismo modo de proceder para poder
contribuir al DESPERTAR de las masas y
enseñar verdaderamente a ser SUJETOS de la sociedad en la que se desenvuelven.
En relación al
conocimiento que se tenga de sí mismo, en muchas ocasiones se encuentran
sujetos que tienen vastos conocimientos sobre diferentes acontecimientos externos,
hombres muy cultos y muy eruditos en cuanto al conocimiento del mundo; pero resultan
ser completamente ignorantes sobre lo que conocen de sí.
Por
lo tanto para responder a la interrogante planteada ¿A quién sirve el
conocimiento? dependerá del punto de vista de aquél que se dedique a acumularlo
y las intenciones con las cuales indague e investigue sobre diferentes aspectos
de la vida particular o social.
[1](http://www.reeduca.com/conocimiento-social)
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